El futbolista que se convirtió en monje budista tras ser campeón comparte las claves de la felicidad
Kevin Lidin, el futbolista que se convirtió en monje budista tras retirarse por culpa de las lesiones, tiene la clave para ser feliz: "No tomarse la vida demasiado en serio"
ENRIQUE CORBELLA Actualizado 16/04/2024 - 08:33
Kevin Lidin, futbolista profesional sueco que llegó a jugar en la Serie C en Italia, tuvo que retirarse prematuramente del fútbol por culpa de la lesiones.
Tras colgar las botas se convirtió en monje budista para disfrutar de una vida tranquila y de contemplación en Tailandia.
"En 2021 mi carrera futbolística profesional terminó debido a lesiones. Empecé a preguntarme qué es la felicidad y cuál es el propósito de la vida", reflexionó Lidin en 2023.
¿Qué cambios experimentó la vida del futbolista Kevin Lidin tras convertirse en monje budista?
En su cambio personal Kevin Lidin dejó el alcohol y abandonó el consumo de "productos fáciles" como las redes sociales o alimentos poco saludables en la búsqueda de la "verdadera felicidad".
"Después de estudiar la ciencia de la felicidad, convertirme en monje y practicar yoga, encontré la respuesta de qué es la felicidad. Aprendí cómo conseguirla y cómo conservarla", desveló.
"Hasta que me convertí en monje, no entendí realmente la importancia de dar a otras personas. Cuando le das a alguien, y sale de tu corazón (no siendo forzado) y el receptor acepta el regalo y lo aprecia. La felicidad se experimenta para ambos", explica.
Kevin Lidin explica detalles de su nueva vida como monje budista
Sobre su nueva vida como monje Lidin escribe en Instagram que "los monjes reciben comida y a cambio les dan una bendición o una enseñanza. Sin esto, los monjes no tienen comida. Recibir comida de personas que viven una vida muy sencilla fue difícil... Muchos occidentales no practican la donación. Porque piensan que la felicidad es el dinero y las cosas materiales. Y regalarlo sería lo mismo que regalar la felicidad. Por eso nos aferramos a las cosas, siempre queremos más y no pensamos en los demás".
Las tres lecciones de vida que siempre es importante recordar, según Kevin Lidin:
1. Eres el único responsable de tu propia felicidad.
2. No hay relación más importante que la que tienes contigo mismo.
3. No culpes a los demás por tus propias reacciones. La ira, la desesperación y la frustración nunca vienen del exterior.
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